Se presenta en forma de moldes finos y flexibles que se adaptan a la dentadura y permiten el blanqueado en la parte anterior y posterior de los dientes. Es un método cómodo y sencillo para conseguir unos dientes hasta ocho tonos más blancos.
El efecto blanqueante immediato es ya visible desde la primera aplicación, pero se recomienda aplicar el tratamiento durante cinco días consecutivos para unos resultados óptimos y duraderos.